El proceso de adaptación involucra a todos los actores: profesoras, niños, familias y jardín. Sabemos que ingresar al jardín implica un gran cambio en la vida cotidiana, por lo cual es un proceso que asumimos con tranquilidad, dando a cada niño y a cada familia el tiempo y el apoyo que necesitan, para que llegue el momento de despedirse del niño con seguridad y confianza.

La rutinas de sueño son muy importantes para los niños, por lo cual, atendiendo a las necesidades de cada niño y de los horarios que maneje, se disponen las condiciones para que haga una siesta segura, acompañado siempre por un adulto.

Lo realizan profesoras o asistentes pedagógicas capacitadas, en los sitios destinados para tal fin, siguiendo siempre los más rigurosos protocolos para dicha tarea.  

Las puertas de Origami siempre están abiertas para los padres. Tanto a las horas de llegada como de salida o en cualquier otro momento los padres son siempre bienvenidos a entrar y a vivenciar las actividades del jardín. Mantenemos una comunicación permanente a través de Origami App. Igualmente nuestro equipo está permanentemente disponible para atender cualquier situación o duda que tengan los padres. 

De acuerdo con los proyectos que se realizan en cada grupo, los niños mayores de 2 años pueden hacer salidas pedagógicas, previamente organizadas por Origami y autorizadas por los padres, a lugares seguros en donde puedan ampliar y consolidar sus aprendizajes.

Para cuidar a nuestras familias y a nuestro equipo de trabajo, cumplimos minuciosamente con los protocolos de bioseguridad exigidos por las autoridades. Haz clic aquí y conoce nuestro protocolo de bioseguridad.